Comprar un piso para alquilarlo ya no es la única manera de invertir en ladrillo. Hoy en día, gracias a la tecnología y las plataformas colaborativas, puedes invertir en el sector inmobiliario desde solo 100 €. Hablamos del crowdfunding inmobiliario, una fórmula que está ganando fuerza en España.
Pero, ¿es realmente rentable? ¿Es seguro? ¿Qué ventajas e inconvenientes tiene? En Finanzas Fáciles te lo explicamos con claridad, sin tecnicismos, para que puedas decidir si esta alternativa encaja con tus objetivos financieros.
Es un sistema de inversión colectiva que permite que varias personas financien conjuntamente un proyecto inmobiliario, ya sea para su compra, reforma, alquiler o venta. Cada inversor aporta una cantidad y, a cambio, recibe un porcentaje de los beneficios que genere el inmueble.
- Una promotora o empresa presenta un proyecto (por ejemplo, la reforma de un piso en Barcelona para alquilar).
- La plataforma de crowdfunding lo valida y lo publica en su web.
- Tú decides cuánto invertir: desde cantidades pequeñas (100 €, 500 €, 1.000 €…).
- El proyecto se ejecuta: compra, reforma, alquiler o venta.
- Tú cobras los beneficios, normalmente en forma de dividendos periódicos o una ganancia final al vender.

Plataforma | Inversión mínima | Tipo de proyectos |
---|---|---|
Housers | 100 € | Alquiler, reforma y venta |
Urbanitae | 500 € | Promociones nuevas y suelo |
Inveslar | 100 € | Pequeños proyectos residenciales |
Brickstarter | 50 € | Viviendas turísticas |
👉 Todas están reguladas por la CNMV (Comisión Nacional del Mercado de Valores), lo cual es un sello importante de seguridad legal.
La rentabilidad varía según el proyecto y su riesgo, pero como referencia:
- Proyectos de alquiler: entre un 3 % y 6 % anual.
- Proyectos de compraventa (fix & flip): hasta un 12 % anual o más, si el mercado acompaña.
💡 Ten en cuenta que la rentabilidad no está garantizada. Como toda inversión, conlleva riesgos.

- Accesible: puedes invertir desde cantidades muy pequeñas.
- Diversificación: puedes repartir tu dinero entre muchos proyectos distintos.
- Transparencia: las plataformas muestran toda la documentación del proyecto.
- No te complicas: no tienes que gestionar alquileres, reformas ni impuestos.
- No es líquido: si necesitas tu dinero, no podrás recuperarlo hasta que acabe el proyecto (pueden ser años).
- Riesgo de impago o devaluación: si el mercado baja o el proyecto fracasa, puedes perder dinero.
- Gastos y comisiones: algunas plataformas aplican comisiones que reducen tu rentabilidad neta.
- Menos control: tú no decides cómo se gestiona el inmueble.

El crowdfunding inmobiliario puede ser interesante si:
- Estás empezando a invertir y quieres probar con poco dinero.
- No quieres comprar un inmueble completo, pero te interesa el sector inmobiliario.
- Buscas diversificar tus inversiones más allá de bolsa o criptomonedas.
- No tienes tiempo ni ganas de gestionar un alquiler tradicional.
- Quién hay detrás del proyecto (promotora, arquitectos, experiencia).
- Dónde está el inmueble (zona, demanda, situación legal).
- Plazo de inversión y rentabilidad esperada.
- Costes asociados (comisiones, impuestos, posibles penalizaciones).
- Plan B del proyecto si algo no sale como se espera.

No pongas todos tus ahorros en un solo proyecto. La clave está en diversificar entre varios inmuebles y plataformas. Así, si uno falla, el impacto será mucho menor.
Y por supuesto, invierte solo lo que estés dispuesto a dejar “quieto” varios años.
Sí, pero no es libre de riesgo.
El sector está regulado en España, pero como cualquier inversión, tiene incertidumbres. No hay garantía de devolución como en un depósito bancario. La clave está en informarte, diversificar y no dejarte llevar por promesas de rentabilidades demasiado altas.

El crowdfunding inmobiliario en 2025 es una opción moderna, accesible y flexible para quienes quieren entrar en el mundo de la inversión inmobiliaria sin comprar un piso entero.
No es para todos los perfiles, pero puede tener mucho sentido si:
- Quieres diversificar con poco capital.
- Te interesa el inmobiliario pero no quieres complicaciones.
- Aceptas el riesgo a cambio de una posible rentabilidad superior.
En Finanzas Fáciles creemos que el futuro de la inversión será cada vez más colaborativo y digital. Y el crowdfunding inmobiliario es una prueba de ello.